A una corona muy traviesa le encanta follarse joven muy caliente con su vagina apretada, es adicto a las ninfetas y terminó llevándose bien con estas dos. Los condenados estaban en la casa de la corona bebiendo con él cuando se pusieron cachondos, pronto empezaron a cogerse y dejaron al macho mirando todo, pero el cachondo hablaba más fuerte que él y después de unas copas de whisky entra en los jóvenes con un cachondo y se jodió mucho con su vagina.